Nani Roma sube otro peldaño, pero Al Attiyah parece inalcanzable

Nasser Al Attiyah, piloto de Toyota en el Dakar.
Nasser Al Attiyah, piloto de Toyota en el Dakar.
EFE
Nasser Al Attiyah, piloto de Toyota en el Dakar.

Muy mal se le tendría que dar o muchos problemas debería tener Nasser Al Attiyah para no conseguir el jueves su tercer trofeo touareg como campeón del Dakar. El qatarí fue segundo, después de que Sebastien Loeb se llevase con autoridad la octava etapa del raid, entre San Juan de Marcona y Pisco, en la que las dunas se llevaron por delante las opciones de un Stepháne Peterhansel que ha visto cómo la mala suerte no le ha abandonado en esta edición.

Al Attiyah fue el vencedor provisional durante varias horas sobre el sudafricano De Villiers y el polaco Przygonski, dos pilotos que no se juegan nada más allá de sumar una llegada más en el Dakar, pero un Loeb que salió encendido tras sus problemas del día anterior, le arrebató la gloria en meta cuando ya casi todos habían contado con la victoria del qatarí.

Estos resultados permitieron que Nani Roma, gracias a su innegable regularidad, se haya situado segundo a dos días de la meta de Lima. El piloto español, que ya pasó al ataque el día anterior, acabó a 8 minutos y medio de Al Attiyah, pero superó a un Peterhansel que se dejó en las dunas más de 20 minutos y, con ello, la segunda plaza de la general. Para 'Monsieur' Dakar está siendo una edición muy dura y Roma es ahora segundo con siete minutos de margen sobre el trece veces campeón del raid.

Al Attiyah afronta las dos últimas jornadas del Dakar con 46 minutos de margen sobre Nani Roma, pero el Dakar es capaz de ser muy cruel hasta los últimos kilómetros. Que se lo digan a Ricky Brabec.

Cae el líder de motos

La jornada comenzó con un nuevo giro de guión en la categoría de motos. En un Dakar en el que nadie se atreve a dar a nadie por favorito, al menos en las dos ruedas, Ricky Brabec se vio obligado a abandonar por la rotura del motor de su Honda. Sólo había disputado 56 kilómetros de los 361 de la especial de este martes.

Los grandes beneficiados por el abandono del estadounidense y de los problemas de Adrien Van Beveren (se dejó más de once minutos y podría haberse hecho con el liderato) son los componentes de KTM. La marca austriaca se ha quedado sola al frente de la catgoría en el Dakar, que han ganado de manera ininterrumpida desde el año 2000.

El nuevo líder es Toby Price, campeón del raid en 2016, y que tras acabar a poco más de un minuto de Matthias Walkner, ganador del día, se coloca como el referente para repetir éxito tres años después de su primer triunfo. No obstante, no se podrá confiar: tiene al chileno Pablo Quintanilla a sólo un minuto.

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